Una espada es una obra de arte única, forjada por un maestro herrero, en la que distinguimos, básicamente dos partes: la empuñadura y la hoja.

Las primeras espadas aparecen en la Edad del Bronce como una evolución de las dagas y los puñales. Esta arma blanca fue evolucionando a medida que se descubrían nuevas aleaciones y técnicas de forjado que hacían posible una mayor longitud, flexibilidad y dureza. Dichas cualidades las postulaban como armas útiles para la lucha en el campo de batalla.

Hoy en día su significado es totalmente distinto. La espada es símbolo de justicia, de poder, de valentía, de estatus… Todavía se utilizan en los uniformes ceremoniales de cargos militares, como insignia de algún cuerpo de seguridad, o como emblema en escudos heráldicos.

Hablar de espadas es hablar de aquellas que han hecho historia o son leyenda; bien sea en la ficción como en la realidad. y por consiguiente se les has puesto nombre elevándolas a un nivel superior.

Conociéndote, estamos seguro que reconocerás los siguientes nombres:

“Excálibur”, la espada insertada en roca, del Rey Arturo, el caudillo britanorromano que dirigió la defensa de Gran Bretaña contra los invasores sajones a comienzos del siglo VI.

“Tizona”, la espada conquistadora del Cid Campeador.

“Aguja”, la espada que regaló John Nieve a Arya Stark antes de partir hacia El Muro.

“Guardajuramentos”, espada de acero valyrio perteneciente a Jaime Lannister.

“Dardo, Aguijón o Picadura”, es la espada de Bilbo ( en El Hobbit) y Frodo Bolsón (en El Señor de los Anillos), forjada por los Elfos y que se ilumina cuando los orcos o duendes se acercan.

“Atlantean”, la espada de Connan el Bárbaro.

“Espada Maestra”, la icónica y legendaria espada de la franquicia de videojuegos de fantasía y acción-aventura “The Legend of Zelda”.

“Sable de luz”, espada de plasma que sólo pueden empuñar jedis y shits y que cuyo color esconde un significado…